Control de Olores

En los procesos de tratamiento de aguas residuales se llegan a generan subproductos que pueden causar malos olores,  en el tratamiento anaerobio se encuentran sulfatos o sulfuros  que producen Sulfuro de Hidrógeno (H2S), el cual se caracteriza por su olor a huevo podrido, en el tratamiento aerobio la causa principal es la mala oxigenación y/o aireación del agua la cual conlleva a la muerte de los microorganismos provocando mal olor.

 

Este hecho genera molestias a los poblados cercanos a las instalaciones de una PTAR (Planta de Tratamiento de Agua Residual), por lo que toman gran importancia las tecnologías que remueven los malos olores, como son los biofiltros que tienen la capacidad de remover hasta un 99% de los contaminantes tales como Sulfuro de Hidrógeno, la remoción de olores se realiza a través de la actividad metabólica de microorganismos que descomponen los contaminantes y olores de aire en sustancias no tóxicas e inoloras como son el dióxido de carbono y agua.